1. Define tus metas financieras y establece objetivos claros
Todo buen plan de ahorro empieza con un objetivo concreto. Define qué quieres lograr a corto, mediano y largo plazo. Puede ser tu viaje soñado, el pago de una deuda, la compra de una vivienda o tu jubilación. Una vez tengas tus metas claras, es más fácil saber cuánto debes ahorrar y en qué tiempo. También puedes apoyarte en herramientas de banca digital que te ayudarán a llevar un registro de tus ahorros y a ajustar tu estrategia según lo necesites.