¿Puedo pedir un préstamo personal si ya tengo otro?

Imagínate esto: ya tienes en marcha un préstamo personal que solicitaste hace algún tiempo. Pero ahora tienes una nueva necesidad financiera añadida y piensas que otro préstamo podría ser la solución perfecta para satisfacerla.

La pregunta que te asalta, y que le asalta a muuuchas otras personas en tu situación, es esa de "¿puedo pedir un préstamo personal si ya tengo otro?" Spoiler: Si, ahora te lo contamos todo.

¿Puedo pedir un préstamo personal si ya tengo otro?

20 Octubre 2023

¿Si tengo un préstamo personal puedo pedir otro?

Sí, puedes solicitar un nuevo préstamo personal, aunque ya tengas uno en curso y aún no hayas terminado de pagarlo. No hay ninguna ley que lo prohíba ni las entidades financieras están cerradas a ello.

Sin embargo, debes tener en cuenta que solicitar otro préstamo requiere normalmente de una capacidad de pago mayor que para un único préstamo. A fin de cuentas, un préstamo en curso ya incrementa tus gastos, lo que hace que dispongas de menos dinero para afrontar otro más. Además, también son importantes tu historial crediticio y, por supuesto, las políticas específicas de cada entidad financiera.

En cualquier caso, nuestra recomendación es que medites bien esta solución antes de decantarte por ella.

¿Cuántos préstamos personales puedes tener?

No existe un límite establecido sobre el número de préstamos personales que se pueden tener. Todo depende de la solvencia económica y del historial de crédito de cada persona.

Lo que importa realmente, y esto es con lo que debes quedarte, es la relación deuda-ingreso. En este sentido, las entidades financieras son precavidas y no van a concederte más préstamos de los que tus ingresos pueden tolerar, tanto para proteger su inversión como para protegerte a ti de la insolvencia y los problemas financieros.

No te preguntes cuántos préstamos personales puedes tener. Pregúntate si realmente los necesitas.

¿En qué casos puede ser necesario pedir otro préstamo?

En líneas generales, y si ya tienes un préstamo, lo recomendable es no sumarle el coste de otro préstamo más. No obstante, hay situaciones en la vida en las que un segundo préstamo puede ser una buena respuesta.

Piensa por ejemplo en una emergencia médica, en un gasto de tu vivienda con el que no contabas o en una oportunidad de inversión muy buena. Quizá no tengas dinero en ese momento, pero sí la seguridad de que lo irás recibiendo poco a poco y que podrás hacer frente a la deuda contraída. En casos así puede ser interesante.

El consejo es el mismo: evaluar cuidadosamente la necesidad real de un nuevo préstamo.

¿Qué tener en cuenta antes de pedir otro préstamo?

Lo primero es: un préstamo tiene intereses. Es una deuda a la que deberás hacer frente poco a poco a lo largo de los meses o de los años y no puedes pensar únicamente en tus necesidades presentes.

En este sentido, lo más sensato es evaluar tu capacidad de pago real y la seguridad de que esa capacidad se mantenga en el tiempo. No es lo mismo un contrato indefinido, que los ingresos de un cliente freelance que tiene más riesgo a perderlos.

Además, también tienes que estudiar muy bien el coste total de un nuevo préstamo mediante el TIN y la TAE, las comisiones y otros posibles costes asociados. Para ello, siempre puedes utilizar un simulador de préstamos personales en diferentes entidades financieras, comparar y elegir el que mejor se adapte a tus necesidades y situación financiera.

Alternativas a un segundo préstamo personal

Tienes una necesidad. Eso es evidente. Pero eso no significa que debas necesariamente realizar una solicitud de préstamo nueva. Porque hay otras alternativas a tu disposición.

Una de ellas es el uso de una tarjeta de crédito que, aunque suelen tener una disposición de crédito más limitada, puede ser suficiente en ocasiones para cubrir tus necesidades o deseos sin tener que meterte en un préstamo.

Hay otras soluciones que puedes explorar. No contrates otro préstamo sin valorar toooodas las opciones.

Consejos para gestionar múltiples préstamos personales

¿Estás decidido a tener dos o más préstamos vigentes? Vale: entendemos que lo has analizado todo bien y que verdaderamente encaja dentro de tu situación financiera.

La cosa ahora es cómo gestionarlos adecuadamente para que no se vuelvan en tu contra. En ese sentido, lo primero es mantener un seguimiento detallado de todo lo que los compone: los plazos de pago, los saldos pendientes, las tasas de interés... Crea una hoja de cálculo y tenlo todo bien organizado. ¡Es fundamental!

También deberías ajustar los gastos de tu presupuesto mensual para que no falles nunca en ningún pago de tus préstamos. Esto es clave.